E...Era...¿Enserio estás celosa?
Di media vuelta para dirigirme a la puerta.
Oí unos pasos silenciosos y ágiles seguirme.Cuando estaba a punto de abrir la puerta,me cogió por el brazo provocando que diera media vuelta,para posteriormente cerrar la puerta.Pocas milésimas después,noté como su cuerpo ejercía cierta presión sobre el mío.Posó sus manos en mis caderas y se iba aproximando más,más,más...
Hasta que podía sentir su fresco aliento cerca de mis labios.
-Era...-Me besó tiernamente sobre e pelo.-Una fan.
Reaccioné de forma cariñosa y le rodeé su cuerpo con mis brazos.
-¿Sabes?-Continuó diciéndome-Me gusta que te pongas celosa...
Esta vez fue él el que posó sus manos en mis caderas,me atrajo hacia él y me besó pasionalmente.
Cuando hacía eso,me hacía sentir frágil,muy frágil.
-Porque...muestras una parte de ti que por primera vez muestras frente a mí...-Me explicó.
Al oír aquello,mi corazón se aceleró y busqué de manera insaciable sus labios sabor fresa con chocolate.
Esta vez fue algo lento,suave,elegante...
Se separó de mi muy lento:
-Voy a cambiarme.
-Ok,te espero.¡Y no tardes!Que te conozco...-Esto último lo dije más bajo.
Espero,espero y espero.A pesar de mi advertencia,nada,no me hizo caso.Apareció al cabo de un buen rato.
Su torso estaba desnudo.Me quedé contemplando aquella obra de arte que a formaba él.
-¡Diana!
-¿Eh?-Dije desembobándome,cosa que le pareció graciosa.
-Te decía que cuál prefieres.-Esta vez presté atención a lo que llevaba en las manos.2 camisas,el modelo era el mismo,pero distinto color,una roja y la otra negra.
-Mmm....Me gusta más la roja.
Se la puso en una fracción de segundo.
-Ya podemos irnos.¡Ah!Una cosa,le he dado la noche libre al chófer,y ya todos se han ido.
-De modo que conducirás tú.-Deduje.
-Exacto.
Pensé que no tendríamos ningún problema,pero no fue así.Resultó que conducir no era uno de sus fuertes.
-¿Por qué no me has dicho que no conducías ``muy bien´´?-Le reproché.
-Temía que no quisieses venir conmigo.
-No seas tonto.-Le di un codazo de manera cariñosa.
Nos apeamos del coche y nos encaminamos al hotel.
Ambos caímos rendidos,había sido un día agotador.
Yo era feliz en aquel momento.La persona más feliz sobre la faz de la Tierra.
Me tumbé sobre la amplia cama y abracé a Michael por detrás.Éste,al percibirme,se dio la vuelta y fue él el que me envolvió con sus brazos protectores.
-Te amo.-Me susurró al oído.
-Te amo.
-Quiero permanecer a tu lado eternamente.-Me dijo.
-No sabes cómo me gustaría que tu deseo se hiciese realidad,pero mañana por la tarde,nosotros tenemos que irnos,y tú tendrás que seguir con tu gira.
-Tienes razón y te equivocas.-Prosiguió Mike.-Tienes razón en que mañana tienes que irte,pero lo que tú no sabes es que éste era el último concierto que tenía que dar.
Le miré esperanzada y le di un ósculo.
-¿Y qué pasará después?-Pregunté.-¿Volveremos a vernos?
-Sí,de eso puedes estar seguro.
Me volvió a abrazar,esta ves más fuerte y juro por lo que más quiero,que en ese momento,un escalofrio recorrió mi cuerpo.
A la mañana siguiente,nos tuvimos que ir.Tremendo abrazo de despedida le di a Michael,él,por supuesto que me correspondió de buena gana.
-Te voy a echar muchísimo de menos.-Dije acentuando cada palabra.
-Y yo a ti.
-¿Me llamarás?
-Todas las noches.-Me contestó.
Ya de camino:
-Ni que no lo volvieras a ver.-Me espetó Gabriel.
-Ya veo cómo me apoyas,¿eh?-Le contesté.
-No seas boba,tú sabes que yo te aprecio mucho,anda ven aquí.
Me le acerqué y me rodeo con un abrazo.
-Ya verás como seguro esta noche te llama.-Me consolaba Andra.
-Andra tiene razón.-Apoyó Erik a Andra.
A lo mejor resulta exagerado y todo,pero Michael había cobrado tremenda importancia en mi vida.Tanto que en su ausencia,hasta el aire me sobraba.Eso era lo que mis amigos no conseguían entender...
Llegué a mi casa perceptiblemente triste,sin ánimos.
-¿Pero que te pasa?
-Nada.-Mentí a mi madre y me dirigí a mi habitación.
Al cabo de un rato,no mucho,llamaron a la puerta.No contesté.Pero alguien se asomó.Era mi madre:
-¿Por qué no me cuentas lo que te ha pasado?
-Es que me lo pasé muy bien y me da pena que haya durado tan poco.-La mentí,porque sabía perfectamente que ella no lo entendería.
Comenzó a dar lentos pasos hasta llegar a mi cama:
-Ah...Bueno,de modo que era eso...-Se acercó aún más a mí y me dio un abrazo maternal.-No te preocupes.-Dijo quitándole importancia al asunto.-Seguro que en tu vida habrá momentos más bonitos que ese.
Lo dudo mucho.Aunque no me atreví a decirle nada.
Y se levantó sin más y me volvió a dejar sumida en mis pensamientos.
Al poco rato,sonó mi móvil.Esperanza,no podiendo más,contesté creyendo que era Michael:
-Alo...-Dije insegura.
-¿Diana?-Oí la voz de Gabriel.-¿Cómo te encuentras?
-Mejor.-Decía yo la verdad.
-Oye,llamaba para que quedaramos tú y yo para ir mañana juntos a clase.
-Vale.
-Entonces,nos vemos mañana.
Y colgó sin más.
Sólo faltaban 2 semanas de clase,y la época de examenes ya se había pasado.
No pasaron 5 minutos,y mi móvil volvió a sonar.Me dirigí a cogerlo con la misma ilusión de antes,con la diferencia de que esta vez,sí que era Mike:
-Hola...-Dijo una voz dulce cálida pero al mismo tiempo firme.-¿Cómo estás?
-Ahora que oigo tu voz,de maravilla.-Le confesé.
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